Para descubrir esta inmensa arboleda hay que dirigirse al municipio de Genalguacil, al que se puede acceder desde Estepona y eligiendo la carretera local. Pasado el kilómetro 15 se halla el puerto de Peñas Blancas. A esa altura seguimos el indicativo que nos señala la zona recreativa de los Reales de Sierra Bermeja de donde, de forma ascendente, parte una pista asfaltada. Tras recorrer aproximadamente 2,5 kilómetros nos encontraremos en una curva cerrada el cartel indicativo, en madera rústica: Paseo de los pinsapos.
Empezamos el recorrido con un descenso corto adentrándonos en pocos metros en el pinsapar y sorprendiéndonos la penumbra y poca luz que dejan pasar los ejemplares bajo sus copas. La mayoría de las rocas está cubierta de musgos, que denotan la humedad que caracteriza a estos parajes.
La senda, tras el corto descenso, discurre casi durante todo el recorrido sin cambios bruscos de nivel, convirtiéndose en un placentero paseo. Conforme vamos avanzando, nos iremos encontrando con pequeñas elevaciones, que nos invitarán a hacer un alto en el camino para contemplar maravillosas panorámicas del Valle del Genal y de litoral malagueño.
Al final del recorrido, existe otro descenso, que nos hará atravesar un abrupto arroyo, flanqueado de majestuosos y centenarios pinsapos, donde existe un bonito puente de madera, el cual, debemos cruzar. A pocos metros, llegamos a la plazoleta de Genalguacil, final del itinerario, en donde a la belleza del lugar en sí, hay que añadir un muro de piedra, en el que hay inscrito, en cerámica, un bello poema dedicado a los árboles escrito por Federico García Lorca.