Hay en Genalguacil un gran aprecio por el entorno y sus habitantes. Un grupo de amigos, que de vez en cuando hacíamos una caminata no excesivamente larga para descubrir nuevos rincones y parajes desconocidos, decidimos, hace ya más de un año, emprender aventuras más lejanas. Dicho y hecho… Casares, Pujerra, Faraján, Cortes de la Frontera y Gaucín.
Decidimos formar una asociación, cuyo nombre es Asociación Socio-Deportiva “Cerro de San Pedro”.
La primera caminata, una vez constituida la Asociación, fue al Cerro de San Pedro. Se trata de una montaña en Sierra Bermeja entre el monte Tizón y Los Reales. Después de ocho horas de camino llegamos al refugio. Allí repusimos fuerzascon un buen almuerzo. Coplas, alegría y baile que no faltan en ninguna excursión.
La estrella de las caminatas es la ruta de Casares, atravesando todo el Monte del Duque, y repetimos de nuevo. En esta ocasión tuvimos el placer de que nos acompañara Antonia Navas, una señora de 81 años que deseaba volver a realizar ese camino que tantas veces tuvo que hacer en su juventud. A pesar de su edad, hizo el camino sin ningún problema. Es digna de admiración.
He de decir que somos un grupo al que, además de disfrutar con la contemplación de este maravilloso Valle, nos une la Amistad, la Armonía y la Alegría, y nos gusta mucho cantar y bailar. Todas nuestras caminatas las terminamos cantando y bailando con el acordeón que un amigo porta en su coche.
Francisco Piñel y Miguel Cózar tocan el acordeón, Juan, el de la Quinta, toca el tambor y alguno que otro las sonajas. Y ya tenemos la fiesta formada. Así hasta que nos compadecemos del chófer del autobús que nos ha de traer devuelta.
La experiencia es muy bonita, los rincones y paisajes que descubrimos son maravillosos. Animo a todos los vecinos del Valle a que salgáis a descubrirlo, respetarlo y cuidarlo… ES UN PARAÍSO.
Fina Cózar